2.6 Poética Visual/Ciberpoética

Poética Visual







La poesía visual se centra en la comunicación, más que en un fin estético. Utiliza la palabra como medio expresivo y construye lo visual.


Relacionada íntimamente con el Arte postal, los límites de ambos están poco definidos en la mayoría de ocasiones.



En un poema visual hay dos componentes fundamentales, el icónico y el verbal, aunque también puede participar en su aspecto visual el lenguaje sonoro, el fonético, el lenguaje matemático, etc. Estos lenguajes hacen que su esencia difiera de la poesía verbal.


En su estudio han de tenerse en cuenta elementos como el uso de la tipografía, el uso del color o su ausencia, la disposición del espacio, la inclusión del diseño gráfico... En general, lo verbal y lo icónico convergen en una forma de arte de síntesis, en una forma de poesía iconoclasta y lejos de lo convencional que estaría representado por la poesía verbal.


Décio Pignatari, uno de los fundadores del movimiento internacional de poesía visual o poesía concreta, señala a los poetas visuales como diseñadores del lenguaje, ya que se abandona un contexto gramatical para optar por un lenguaje universal, que está por encima de las lenguas y razas: el lenguaje de las imágenes, de los grafismos.



Pero para que exista poesía visual, es necesario un público, un espectador. La carga emotiva de la poesía visual solamente se hace realidad cuando alguien entra en contacto con esta.



Una característica de la poesía visual es la presentación minimalista de las ideas. El poeta debe expresar lo que siente y lo que piensa en una imagen única y sencilla, con un mínimo de recursos: unas cuantas imágenes y letras.




Origen e historia de la poesía:



La poesía visual, por tanto, depende en alto grado de la apariencia física del texto, que es no sólo su soporte sino su misma razón de ser (Bohn 1986: 5). A diferencia de otros géneros digamos «tradicionales», de base fundamentalmente oral, los visuales no son textos que puedan ser simplemente escuchados por el receptor, que de esta manera nunca llegaría a captar su naturaleza. Es un género donde priman los aspectos gráficos y que en ocasiones incorpora imágenes u otros elementos visuales junto con los signos lingüísticos o incluso en lugar de ellos. Según la clasificación establecida por Eleanor Berry (1993), estos poemas pueden presentarse en forma figurativa o no figurativa.


A su vez, los poemas figurativos pueden ser miméticos o abstractos; los no figurativos, isométricos o heterométricos. Los poemas figurativos son, naturalmente, aquellos que representan «figuras», bien de los objetos a que se refiere el poema (un altar, una botella, un corazón: poemas figurativos miméticos), o bien de formas geométricas (un rombo, una pirámide: poemas figurativos abstractos).



Por su parte, los poemas no figurativos disponen las líneas de verso sin el recurso a formas de figuras, como en los ejemplos citados de Gil de Biedma, Eliot y O'Hara (si la medida de los versos es siempre la misma serán poemas isométricos; si es distinta, heterométricos).



Existen manifestaciones de poesía visual en todas las literaturas desde la Antigüedad. Por lo que respecta a la tradición occidental, sería posible trazar diferentes tendencias o etapas, según las modificaciones que el género ha experimentado a lo largo del tiempo. Grosso modo, serían éstas:



1) una primera época, la más larga de todas, que iría desde los comienzos de la tradición hasta aproximadamente principios del XVIII, en la que predominan los llamados «poemas de figuras».



2) un segundo momento que comienza a finales del XIX con la experimentación gráfica de Una jugada de dados de Mallarmé y que continúa con los caligramas de Apollinaire.



3) una tercera corriente, impulsada por las innovaciones vanguardistas del XX, sobre todo el futurismo, el letrismo, el imaginismo y los experimentos del verso libre.


4) las manifestaciones del género desarrolladas a partir de los años cincuenta y sesenta del siglo XX y conocidas como «poesía concreta».


A éstas podrían añadirse otras modalidades posteriores, como la poesía semiótica y la nueva poesía cibernética.




La poesía visual no ha sido inventada en el siglo XIX ni en las primeras vanguardias del siglo XX. Es prácticamente tan vieja como la poesía escrita y así lo demuestra la existencia de caligramas y otros poemas figurativos. Pueden considerarse el inicio de la poesía figurada en verso los caligramas atribuidos al poeta griego Simmias de Rodas hacia el año 300 a. C. Su caligrama El huevo tiene que leerse alternadamente, el primer verso y luego el último, el segundo verso y luego el antepenúltimo, hasta terminar en el verso central.



Más modernamente, es el escritor cubista Apollinaire quien hace revivir de nuevo el género con sus caligramas.


Apollinaire, maestro de la poética visual


Fue poeta, novelista y ensayista francés. Una figura clave en la consolidación de las vanguardias de principios del siglo XX.



Desde 1902 entabló relación con el ambiente artístico y literario del París de la época, contribuyendo como crítico para varias revistas, entre ellas “Mercure de France” y “La revue inmoraliste”, desde las que teorizó en defensa de las nuevas tendencias artísticas. Frecuentó los círculos vanguardistas de la capital francesa, se codeó con los jóvenes Picasso, Braque, Chagall, Max Jacob, Marcel Duchamp y Marie Laurencin, con quien entabló una relación sentimental.


En 1909 publica su primera obra en prosa: El encantador en putrefacción, al que suceden los poemarios El bestiario o el cortejo de Orfeo (1911) y Alcoholes (1913). En ellos se refleja la influencia simbolista; sobre todo en el último, revolucionario desde el punto de vista formal, debido a la ausencia de rima y de signos de puntuación, como una mezcla de versificación clásica e imágenes modernas. Aglutina poemas escritos entre 1898 y 1913 y fue publicado en París bajo el sello del Mercure de France, e ilustrado con un retrato del autor por Pablo Picasso. No es casual que el libro se abra con “Zona”, largo poema dotado de ritmo y calidad cinematográfica, que ilumina una vasta y dilatada ‘zona’ para la poesía de nuestro siglo.


El 7 de septiembre de 1911 el poeta fue arrestado durante una semana, acusado de estar relacionado con el robo de La Gioconda, ocurrido el 21 de agosto de tal año. Tal sospecha se vigorizaba debido a su participación en un robo de estatuillas ibéricas, anterior a esta acusación; además de en su propuesta, plasmada en algunos de sus escritos, de quemar el museo del Louvre, argumentando que allí se encarcelaba el arte. Por ello se procedió a su detención, aunque muy pronto se demostró su inocencia y quedó en libertad.


En el mismo año que Alcoholes (1913), aparece el ensayo crítico Los pintores cubistas, en la revista Les Soirées de París ; una defensa escindida del nuevo movimiento como la superación del realismo. Se abre el texto con el siguiente párrafo:


“Inútilmente se cubre el arco iris, las estaciones tiemblan, las muchedumbres corren hacia la muerte, la ciencia deshace y recompone lo que existe, los mundos se alejan para siempre de nuestra concepción, nuestras fugaces imágenes se repiten o resucitan su inconsciencia y los colores, los olores, los rumores que impresionan nuestros sentidos nos sorprenden, para desaparecer después en la naturaleza”


En 1914 obtiene la nacionalidad francesa y se alista como voluntario para la Primera Guerra Mundial. Estuvo en el frente hasta 1916, cuando sufrió una herida peligrosa en su cabeza y tuvo que ser trepanado. Es en este período de guerra cuando escribe lo que será su obra Caligramas, subtitulada Poemas de la paz y de la guerra, que no verá la luz sino hasta 1918, junto a los dramas surrealistas Los pezones de Tiresias (1917) y El color del tiempo. En el mismo año, se casará con Jacqueline Kolb y morirá, luego, un 9 de Noviembre, en París.


Sus Caligramas fueron publicados unos meses después de su fallecimiento; hecho que no detuvo la trascendencia de su poesía y de su nombre, pues aquél poemario lleva al extremo la experimentación formal de sus anteriores obras, preludiando el método surrealista de ‘escritura automática’ al romper deliberadamente la estructura lógica y sintáctica del poema. Son célebres, por otro lado, sus «ideogramas», en que la tipografía servía para «dibujar» objetos con el texto mismo del poema, en un intento de aproximarse al cubismo y como expresión del afán vanguardista de romper las distinciones de géneros y artes.


Para evidenciar todavía más la su gran influencia en el mundo de las vanguardias del siglo XX, Apollinaire fue el primero en dar a conocer y utilizar el término “surrealista”, pues con motivo del estreno de su obra de teatro “Las tetas de Tiresias”, la calificó de “obra surrealista” y añadió: “Cuando el hombre quiso imitar el andar, creó la rueda, que no se parece en nada a una pierna. Así hizo surrealismo sin saberlo".









En Argentina, el panorama se inició con el poema Cantar de las ranas de Oliverio Girondo en 1932; continuó con el grupo Diagonal Cero en 1966 liderado por el artista Edgardo Antonio Vigo, siguiendo hasta los años 90 con el grupo Paralengua, conformado principalmente por Fabio Doctorovich, Carlos Estévez y Roberto Cignoni, el cual realizó numerosos encuentros de poesía visual, experimental y performance poética entre 1989 y 1998. Desde 2000 puede mencionarse Vórtice Argentina que organizó anualmente Encuentros Internacionales de Poesía Visual, Sonora y Experimental. Entre otros nombres a destacar de la escena argentina son: Silvio de Gracia, Juan Carlos Romero, Ruben Mario Tani, Gladys Afamado, Susana Fernández Sachaos, Laura Andreoni, María Rosa Andreotti, Alejandra Bocquel, Claudia del Río, Lilian Escobar, Rosa Farfán, Fernando Fazzolari, Paula Ferraresi, León Ferrari, Adolfo Nigro, Ruben Grau, Hilda Paz, Luis Pazos/Horacio D´Alessandro, Víctor F. Sitá, Javier Ildefonso Sobrino, Alejandro Thornton, Roxana Villarino, Mauro Cesari.



Oliverio Girondo



Resultado de imagen para cantar de la rana oliverio girondo




 La publicaciòn de Paralengua, La Ohtra Poesía,  se caracterizó por aglutinar manifestaciones iniciadas en el período de XUL. Los poetas y colaboradores de XUL –entonces vistos como neobarrocos, neoconcretos, experimentales, etc.–, que provenían de una tradición performática, circense, teatral (y académica), comenzaran a experimentar con diversos soportes y recursos.



En Paralengua se lleva a cabo de modo sostenido el proceso de mezcla enfocado a las nuevas tecnologías de información y comunicación, lo cual auspició tanto una ampliación en la utilización de soportes como un cambio en los modos clásicos de interpretación poética. Videopoesía y poesía digital, por ejemplo, encontraron en Paralengua un espacio propicio de experimentación en la Argentina.
 
Entre los integrantes de Paralengua estuvieron Alonso Barros Peña, Carlos Estévez, Fabio Doctorovich, Javier Robledo, Ladislao Pablo Györi y Roberto Cignoni.


Hacia los años 1970 y 1980 la mera palabra poesía, en razón de su enraizada tradición y por el abordamiento dado desde la escuela o incluso la academia, provocaba en las personas una inmediata y rotunda asociación o imagen mental para identificarla con los escritos construidos mediante el verso y su progresión vertical, el metro y la rima: o sea, verla como unos pocos renglones superpuestos con el margen izquierdo recto y el margen derecho irregular.

Frente a este exclusivismo, y de hecho este imperialismo formal o logocentrismo, sólo a través de un fuerte trabajo de insistir en publicaciones, muestras o numerosas acciones poéticas fue posible la aceptación del concepto de experimental.  Durante todo el siglo XX la Argentina contó con una serie de artistas y poetas que empujaron por la renovación poética; de hecho, en cada década hubo uno o varios realizadores que presentaban trabajos y apostaban a fondo por el cambio formal de la poesía.


Una de las aplicaciones más interesantes y creativas  en el campo de la Cultura  Audiovisual  son las llamadas metáforas o poesías  visuales. Fotógrafos como Chema Madoz se han convertido en maestros o magos de las metáforas visuales. En este vídeo puedes apreciar una muestra de sus poéticas y siempre  sugerentes  obras de  objetos y formas que sacadas de su contexto habitual cobran vida generando emociones visuales inesperadas.. El  interesantísimo documental de RTVE  "Regar lo escondido" es una buena forma de entrar en el peculiar mundo creeativo de este artista,  Premio Nacional de Fotografía en el año 2000







Ciberpoesía


También llamada "poesía electrónica" o "poesía digital") es la rama de la ciberliteratura en la que predomina la función estética del lenguaje. Técnicamente se caracteriza por el empleo de diversos recursos tecnológicos


Tipos:


Poesía hipertextual: es aquella que (sólo) emplea el hipertexto (la suma de textos y enlaces) para formar una obra poética. Ejemplos: Intermínimos de Navegación poética, Stained Word Window

No-Poesía visual: En el límite entre la literatura y el arte visual se sitúa la "no-poesía", género que emplea los signos gráficos -las letras, los números, los signos especiales- para crear imágenes, al margen de su capacidad significativa habitual. Ejemplos: Poetrica, Tipoemas y Anipoemas

Poesía visual: Abandonando completamente el mundo de la palabra como signo, y empleándola como mero elemento estético, la poesía visual se sitúa más cerca del diseño gráfico o de las artes plásticas que de la literatura. Ejemplos: Il, Empty Velocity, Desde Aquí

Poesía animada o en movimiento: obras poéticas en las que las palabras del texto se mueven o se modifican progresivamente, ya sea por la interacción con el usuario, o de forma automática. Ejemplos: river / running, White Poem, WordToys, Sumergida, Desprendiendo

Holopoesía o poesía holográfica: Se denomina así a aquellos textos con contenido poético desarrollados por medio de la utilización de la técnica holográfica. Ejemplos: [1]

Poesía generada por computadora: Aquellos textos que se crean automáticamente, mediante programas a los que se le han proporcionado unas reglas lingüísticas y semánticas, con mayor o menor interacción del usuario. Ejemplos: Poetry CreatOR2, Poesía Asistida por Computadora, Bacterias Argentinas, IP Poetry, Modelos poéticos y módulos instrumentales en Ciberpoesía eLe, Transgrama - Una poesía y una poética de la contemporaneidad (sólo para Firefox), El poeta digital (poema en un archivo de excel), 3 Poebots - Poesía realizada con el programa GBot

Poesía ASCII: es aquella que emplea los símbolos y caracteres del código ascii, surge con el acceso a los sistemas computacionales y los códigos de programación, jodi.org, bakteria.org,

Poesía virtual: Consiste en textos digitales tridimensionales, interactivos, navegables por intermedio de interfaces de realidad virtual o aumentada. Ejemplos: Poesía virtual, LABO:laboratorio de ciberpoesía,



Más ejemplos de este tipo de obras pueden verse en el Primer Volumen de la Colección de Literatura Electrónica publicado por la Electronic Literature Organization. Destacan en ella, entre otros, Like Stars in a clear Night Sky, muy poético y técnicamente sencillo; The Set of U (poesía visual) o The House (una aproximación a la poesía virtual).


1 comentario: