Estéticas Contemporáneas: De que hablamos cuando hablamos de arte

¿De qué hablamos cuando hablamos de arte? ¿Qué es el arte? ¿Para que sirve? ¿Todo lo que vemos es arte? ¿Qué relación hay entre el tiempo y el arte, siempre fue el mismo? ¿Qué el lo que hace que alguien sea considerado artista?.

Estás como muchas otras preguntas relacionadas con el arte , son las que nos hacemos en varias oportunidades tratando de buscar una explicación simple y clara que resuma de algún modo años de cambios, quiebres, nuevas relaciones, nuevos paradigmas, descubrimientos y en especial nuevas miradas. El arte que vemos hoy en los museos contemporáneos no tiene mucho que ver con lo que se veía hace dos siglos atrás. ¿Cómo llegamos a esto? ¿Cuando comenzaron esos cambios y quiebres que hacen que hoy el concepto de arte ya no pase por la materialidad y el papel del espectador sea mucho más que el de observar una obra.

En términos generales, y tratando de avanzar hacia la contemporaneidad, podemos decir que históricamente el arte imitó la realidad (hasta que apareció la fotografía), personificó seres y mundos imaginarios, mostró el poder político y social, reflejó análisis profundo de la perspectiva, el claroscuro, la fisonomía humana , las luces y las sombras, la forma y el espacio entre muchas otras cosas. Fue bandera de cambios profundos, reflejó la libertad, la pasión, la fuerza, los miedos y las fantasías de las personas.

Walter Benjamin (2007), en “La obra de arte en la era de su reproductibilidad técnica”, sugiere que la experiencia que se construye con la obra de arte es única e irrepetible. Esta singularidad solo puede entenderse como plena libertad. Pensar al arte como experiencia colabora en el proceso de composición estética y crítica por parte de los y las artistas.

El estudio benjaminiano de la estética ha favorecido la profundización del análisis social y cultural que complejiza las concepciones binarias y acríticas en torno al mundo del arte.

Uno de los problemas fundamentales del campo del arte son las tensiones entre la experiencia artística y su representación. Es un desafío pensar las artes en ambos sentidos: la producción a través de la experiencia singular y la reflexión en torno a las posibles representaciones. Al mismo tiempo, el avance de las nuevas tecnologías establece una mediación entre estas representaciones y los espectadores y las espectadoras. Por “nuevas tecnologías” se entendía, al principio, la expansión de la radio y la prensa escrita; con posterioridad, la televisión, las telecomunicaciones e Internet

“Los museos son sólo un montón de mentiras “. Pablo Picasso.

“Voy a pintar cuadros tan feos que nadie va a querer colgar” Roy Lichtenstein

El Objeto Versus El concepto

Volviendo a las preguntas del comienzo. Todo lo que vemos en los museos es arte? ¿Puede ser arte el excremento humano, el aire, el vacío, objetos de la vida diaria, la deformación del cuerpo humano, la muerte o la degradación? ¿Porque? ¿Cómo llegamos a esto? Estas son algunas de las preguntas de las que partimos para analizar lo que llamamos arte contemporáneo. Hagamos primero un recorrido por algunos artistas y obras que cuentan con el status de Obras artísticas